El tema de las multa, generalmente nunca es bienvenido, y menos cuando el fin, no es el de la prevención, sino solamente recaudatorio, y menos aún cuando invocando el artículo 28 de la Ley 6082, en la Pcia. MENDOZA, RETIENEN LA LICENCIA DE CONDUCIR, siendo que ese artículo, fue derogado por la misma CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE MENDOZA. Habiendo además mucha jurisprudencia al respecto, que obviamente el común de los cristianos no conoce, pero sí los atorrantes que aplican las reglas.
En fin un dolor de huevos, que hace que la gente de amotine, ante dicha situación, llegando a situaciones insostenibles, cuando piden mil requisitos para la devolución de la licencia, y ni que hablar del valor de la multa por pisar la líneas amarillas, $ 3850.- contado, $5800.- si se reclama con descargo. Muchas familias con sus bártulos y sus críos, listos para viajar, que han dejado los hoteles, y haciendo colas interminables, porque solamente un ñato atiende los reclamos.
La infracción se cometió, multas del primer mundo, y cero prevención, solo recaudar, con una policía obligada a actuar contra las disposiciones emanadas de la Corte Suprema de Justicia de Mendoza.
Siendo la licencia de conducir, un documento público, personal, e intransferible, que nadie debe ni puede retener, pero veladamente en Mendoza se utiliza su retención de modo puramente coercitivo.
PD: considero que toda reglamentación que ordene, prevenga, y/o castigue a los infractores, debería ser su aplicación realmente justa y equitativa, siempre y cuando LA LEY Y SUS REGLAMENTACIONES SEAN APLICADAS POR LOS FUNCIONARIOS EN FORMA PAREJA Y A TODOS POR IGUAL, SIN EXEPCIONES. Cuando esto no sucede, y algunos tienen coronita, se producen las desigualdades, y por ende las broncas, las puteadas y todo los demás.
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