si puteamos al gobierno y a Kirchner, chantajistas aún con cosas como estas, corruptos, solo espero verlos entre rejas.
Cristina Kirchner congeló el envío de 150 millones de pesos para paliar las consecuencias de las inundaciones en San Luis, en una medida que no sería otra cosa que un castigo contra el senador nacional Adolfo Rodríguez Saá tras las fallidas negociaciones para que el bloque del Peronismo Federal apoyara en la Cámara alta el pliego de Roberto Carles para la Corte Suprema.
La situación fue planteada por el gobernador de San Luis, Claudio Poggi, en una extensa carta que le envió a la Presidenta. Allí, el puntano le recordó a Cristina una solicitud del 18 de marzo para que le otorgue a la provincia “un Aporte del Tesoro Nacional” de 150 millones de pesos “con motivo de la situación de emergencia generada por las intensas precipitaciones e inundaciones que azotaron, en especial, la zona norte y este” de San Luis.
La situación es muy similar a la que se dio con José Manuel de la Sota, al que gobierno nacional le prometió en marzo 540 millones de pesos por las inundaciones pero se lo está dando a cuentagotas. De hecho, para desembolsar los primeros 100 millones, la Casa Rosada especuló con las negociaciones políticas que se estaban dando en Córdoba de cara a las elecciones. El mandatario cordobés tuvo que hacer equilibrio para poder recibir los fondos y ahora espera que le habiliten el resto.
En el caso de San Luis, el tire y afloje por la ayuda para los inundados tuvo como trasfondo las negociaciones de Rodríguez Saá con el kirchnerismo por Carlés. El Gobierno necesitaba los votos del bloque que conduce el Adolfo para poder llegar a los dos tercios, pero la discusión no llegó a buen puerto. El puntano jugó al silencio hasta último momento y recién sobre la fecha ratificó que no votaría el pliego, actualmente congelado en la Comisión de Acuerdos del Senado.
Poggi, protegido pero también controlado de cerca por los Rodríguez Saá, miró la discusión desde afuera y esperó sin éxito el aporte de Nación, que sí entregó fondos a otras provincias afectadas por las inundaciones, aunque gobernadas por el kirchnerismo.
En la misiva que envió a Cristina, Poggi indicó que “desde la misma madrugada en la que la Provincia soportaba los desbordes de nuestros ríos, se comenzaron a atender las necesidades urgentes de los evacuados y damnificados”. Al respecto, el mandatario de San Luis hizo un detallado repaso de las erogaciones que se hicieron en diferentes áreas.
“Esta situación de excepción nos ha obligado a discontinuar proyectos y acciones de suma importancia que no deberían verse postergados por la situación de emergencia pública y notoria cuyas consecuencias hemos reseñado, y en ese sentido es que reitero mi petición de que se otorgue sin más un Aporte del Tesoro Nacional por la suma de 150 millones de pesos a los efectos de afrontar los gastos referenciados”, completó Poggi.
Cristina Kirchner congeló el envío de 150 millones de pesos para paliar las consecuencias de las inundaciones en San Luis, en una medida que no sería otra cosa que un castigo contra el senador nacional Adolfo Rodríguez Saá tras las fallidas negociaciones para que el bloque del Peronismo Federal apoyara en la Cámara alta el pliego de Roberto Carles para la Corte Suprema.
La situación fue planteada por el gobernador de San Luis, Claudio Poggi, en una extensa carta que le envió a la Presidenta. Allí, el puntano le recordó a Cristina una solicitud del 18 de marzo para que le otorgue a la provincia “un Aporte del Tesoro Nacional” de 150 millones de pesos “con motivo de la situación de emergencia generada por las intensas precipitaciones e inundaciones que azotaron, en especial, la zona norte y este” de San Luis.
La situación es muy similar a la que se dio con José Manuel de la Sota, al que gobierno nacional le prometió en marzo 540 millones de pesos por las inundaciones pero se lo está dando a cuentagotas. De hecho, para desembolsar los primeros 100 millones, la Casa Rosada especuló con las negociaciones políticas que se estaban dando en Córdoba de cara a las elecciones. El mandatario cordobés tuvo que hacer equilibrio para poder recibir los fondos y ahora espera que le habiliten el resto.
En el caso de San Luis, el tire y afloje por la ayuda para los inundados tuvo como trasfondo las negociaciones de Rodríguez Saá con el kirchnerismo por Carlés. El Gobierno necesitaba los votos del bloque que conduce el Adolfo para poder llegar a los dos tercios, pero la discusión no llegó a buen puerto. El puntano jugó al silencio hasta último momento y recién sobre la fecha ratificó que no votaría el pliego, actualmente congelado en la Comisión de Acuerdos del Senado.
Poggi, protegido pero también controlado de cerca por los Rodríguez Saá, miró la discusión desde afuera y esperó sin éxito el aporte de Nación, que sí entregó fondos a otras provincias afectadas por las inundaciones, aunque gobernadas por el kirchnerismo.
En la misiva que envió a Cristina, Poggi indicó que “desde la misma madrugada en la que la Provincia soportaba los desbordes de nuestros ríos, se comenzaron a atender las necesidades urgentes de los evacuados y damnificados”. Al respecto, el mandatario de San Luis hizo un detallado repaso de las erogaciones que se hicieron en diferentes áreas.
“Esta situación de excepción nos ha obligado a discontinuar proyectos y acciones de suma importancia que no deberían verse postergados por la situación de emergencia pública y notoria cuyas consecuencias hemos reseñado, y en ese sentido es que reitero mi petición de que se otorgue sin más un Aporte del Tesoro Nacional por la suma de 150 millones de pesos a los efectos de afrontar los gastos referenciados”, completó Poggi.