COMENTARIO DE NOVITAS:
Luego de varios meses de precios en baja, octubre en Chicago viene con recuperaciones interesantes. Los fundamentos no han cambiado (bajistas desde julio) pero los mercados tienen sus “tiempos” y los niveles de precios generan reacciones. Así, queda en evidencia que en la plaza granaria 2+2 no suman 4. ¿Qué significa esto? Que la demanda tiene menos estacionalidad que la oferta. En consecuencia, así como subestimar la demanda es peligroso, también lo es subestimar la “actitud de la oferta”. La presión ejercida sobre las cotizaciones por una producción mundial récord conjunta de trigo, maíz y soja fue muy fuerte e intensa (no hay garantías que no vuelva). Pero los niveles de precios de septiembre tuvieron –naturalmente- la capacidad de contraer la oferta y activar la demanda.
En el caso particular de la soja, el único interrogante es el volumen de la producción sudamericana, puesto que la actitud de la oferta es manifiesta. No sólo el ritmo de ventas de los ‘farmers’ en EE.UU. se ha frenado, sino que ni Brasil ni Argentina ofrecen mercadería a los precios vigentes. Mientras aquí las ventas de soja 2015 se ubican en sólo el 1% de la producción estimada, en Brasil las ventas forward son entre un 20% y un 33% de las verificadas en las últimas tres campañas y la venta de silos bolsa viene a ritmo récord (!!!). Bajo la consigna “Chicago queda en EE.UU.”, todo pareciera presagiar que la historia de la evolución de los precios en el 2015 va camino a repetir lo sucedido en los cuatro últimos años. Esto es, la posición Julio en Chicago (referencia para nuestro mayo) se va a afirmar en nuestra cosecha. Ello, pues las empresas estadounidenses que abastecen su mercado interno (45% de la producción) tendrán que salir a tomar posiciones en el mercado de futuros para asegurarse mercadería ante el ritmo infernal de los compromisos externos. En los últimos meses EE.UU. ha sido el único “kiosco abierto” a nivel global y los compromisos externos al concluir octubre (segundo mes del ciclo 14/15) probablemente superen el 70% de lo proyectado para todo el ciclo. En harina la historia es mucho más impresionante. EE.UU. viene triplicando los compromisos externos respecto del año pasado. Estos datos “garantizan” el nerviosismo de los ‘crushers’ estadounidenses para febrero/abril, toda vez que les será más conveniente mejorar sus ofertas (y/o comprar futuros en Chicago) que tener que ir a abastecerse luego a Brasil. Así, la firmeza de Chicago en nuestro otoño es casi una “fija” con los datos analizados.