Roubini cree que la crisis del coronavirus puede empequeñecer a la Gran Recesión de 2008
"La recesión no será en V, ni en U, ni el L, es más bien una caída en I"
"Los déficits fiscales en las economías avanzadas subirán al 10% del PIB"
elEconomista.es
25/03/2020 - 17:09
Nouriel Roubini, profesor de Economía y Finanzas en la Universidad de Nueva York, es conocido por haber anticipado con precisión la crisis financiera de 2007-2008 y sus consecuencias. Este economista cree que las particularidades de la crisis que está generando el coronavirus requerirán medidas no convencionales que hasta el momento no se han probado en los países desarrollados. Entre esta propuestas, Roubini destaca la necesidad de dar dinero directamente a las familias que no contabilice como deuda. No solo es importante aliviar la situación actual, sino que también resulta trascendental allanar el camino de la recuperación con unos balances saneados. Aún así, si la respuesta no es rápida y contundente se corre el riesgo de sufrir una nueva Gran Recesión, peor que la original: "El riesgo de ver una Mayor Recesión crece día a día".
Por otro lado, "los gobiernos tienen que desplegar un enorme estímulo fiscal, inclusive a través de una 'distribución con el helicóptero del dinero' de desembolsos directos de efectivo a los hogares. Dado el tamaño de la crisis económica, los déficits fiscales en las economías avanzadas necesitarán subir de 2-3% del PIB a alrededor del 10% o más. Sólo los gobiernos centrales tienen balances lo suficientemente grades y sólidos como para impedir el colapso del sector privado"
Además agrega que "estas intervenciones financiadas con déficits deben monetizarse por completo. Si están financiadas a través de deuda gubernamental estándar, los tipos de interés aumentarían marcadamente y la recuperación quedaría asfixiada en la cuna. Dadas las circunstancias, las intervenciones propuestas desde hace mucho tiempo por los izquierdistas de la escuela de la Teoría Monetaria Moderna, incluido el 'helicóptero del dinero', se han vuelto convencionales", comenta el experto.
Si la respuesta de gobiernos y bancos centrales no es amplia, contundente y rápida se corre el riesgo de que esta recesión profunda se convierta en una depresión continua. "Así, el riesgo de una nueva Gran Depresión, peor que la original una Mayor Depresión- crece día a día", asegura Roubini.
Esta vez ni siquiera el uso de todo el arsenal monetaria y fiscal podría evitar una catástrofe. Aunque la respuesta sea rápida y contundente también puede tener efectos secundarios sobre la economía: "La respuesta fiscal podría chocar contra una pared si la monetización de déficits gigantescos empieza a producir una inflación alta, especialmente si una serie de shocks de oferta negativos relacionados con el virus reduce el potencial crecimiento. Y muchos países simplemente no pueden asumir un endeudamiento semejante en su propia moneda. ¿Quién rescatará a los gobiernos, las corporaciones, los bancos y los hogares en los mercados emergentes?".