Uno de los axiomas de Axel Kicillof es que los precios no son el resultado de la oferta y la demanda, sino la suma de los costos más un beneficio que debería determinar el Estado.
Al ministro y vicepresidente de YPF le ha llegado el momento de demostrar su teoría: al derrumbarse el petróleo debería reducirse el precio de las naftas.
Pero eso no va a ocurrir.
En la Argentina el petróleo se mantiene en el nivel que fijó el Gobierno: US$ 83 el barril contra los US$ 69 que cotiza en el resto del mundo.
En otros países, como Colombia o Paraguay, donde no hay "precios cuidados", la doctrina Kicillof se cumple y la gasolina se ha vuelto más barata.
Kicillof confiscó YPF alegando que la voracidad de las petroleras castigaba al automovilista argentino.
Hoy ese automovilista paga una de las naftas más caras del mundo porque Kicillof subsidia a las petroleras. Sobre todo a la que conducen él y Miguel Galuccio.
Kicillof acaba de abjurar del desendeudamiento.
Tal vez en poco tiempo destruya el Informe Mosconi con el que quiso justificar la estatización de YPF
Al ministro y vicepresidente de YPF le ha llegado el momento de demostrar su teoría: al derrumbarse el petróleo debería reducirse el precio de las naftas.
Pero eso no va a ocurrir.
En la Argentina el petróleo se mantiene en el nivel que fijó el Gobierno: US$ 83 el barril contra los US$ 69 que cotiza en el resto del mundo.
En otros países, como Colombia o Paraguay, donde no hay "precios cuidados", la doctrina Kicillof se cumple y la gasolina se ha vuelto más barata.
Kicillof confiscó YPF alegando que la voracidad de las petroleras castigaba al automovilista argentino.
Hoy ese automovilista paga una de las naftas más caras del mundo porque Kicillof subsidia a las petroleras. Sobre todo a la que conducen él y Miguel Galuccio.
Kicillof acaba de abjurar del desendeudamiento.
Tal vez en poco tiempo destruya el Informe Mosconi con el que quiso justificar la estatización de YPF