¿Cómo te imaginás que sería un gobierno de Javier Milei presidente?
—Yo creo que el próximo gobierno enfrenta algo que todos los argentinos no enfrentamos hace un poco más de veinte años. Hay chances de que el próximo gobierno no termine en tiempo y en forma su mandato, pero no por su propia impericia, que su propia impericia va a contribuir positivamente, y estoy hablando de cualquiera de los tres. Paso a Milei después. Porque Cristina Fernández de Kirchner llegó al 10 de diciembre de 2015 hipotecando el futuro. Puso un cepo todo el segundo mandato y se gastó 45 mil millones de dólares. Perdió 45 mil millones de dólares de reservas, tres veces lo que perdió Alberto Fernández. Macri llegó al 10 diciembre de 2019 firmando otra hipoteca, firmó un empréstito por 57 mil millones del FMI para llegar al 10 diciembre de 2019.
—Ambos se consumieron más de 40 mil millones, pero Cristina en ocho años y Macri en cuatro.
—Este gobierno pateó la deuda de 67 mil millones con los bonistas, ley Nueva York que el 80% hay que pagarlo entre 2025 y 2032. Pateó los 47 mil millones de dólares que hay que pagar al FMI, que el 100% hay que pagarlo en esos mismos años. Perdió, se patinó, 15 mil millones de dólares de reservas, para llegar al 10 de diciembre con la lengua afuera. Son tres hipotecas, una arriba de la otra, las hipotecas llega un momento que hay que pagarlas. Entonces, con la complejidad de los problemas económicos, sociales y políticos que hay, más estas tres hipotecas. Más la oferta electoral, que son lo mismo de siempre, más Javier, que ahora lo comento. Cuando juntamos todo esto, realmente el riesgo que el próximo gobierno enfrenta de no terminar en tiempo y forma es considerable. Porque creo que bajo cualquier gobierno va a haber escalada de violencia por la situación desde todo plano, económico, social y político. Y si a esto le agregamos que la situación mundial es la peor de los últimos cuarenta años, todo el mundo tiene la inflación más elevada de los últimos cuarenta años. Todo el mundo tiene el costo de capital más elevado de los últimos cuarenta años. Todo el mundo tiene perspectivas para los próximos tres años de las menores tasas de crecimiento de los últimos treinta o cuarenta años. En consecuencia, no va a haber un mundo amigable para financiar reformas estructurales de fondo. Acá Javier se equivoca y muchos políticos también, aunque un poco más suaves, tienen el argumento falaz de cuanto peor, mejor. O sea, cuanto peor esté lo económico social, cuanto peor este lo político, cuanto peor esté...
—La doctrina del shock de Naomi Klein.
—Claro, tocamos fondo, entonces puedo hacer todo el shock, y eso es mentira. La teoría demuestra y la realidad ilustra que cuanto mejor es el ambiente económico, político, social e internacional, las reformas estructurales pueden ser más profundas y, lo que importa, permanentes. Las reformas, si no son permanentes, son revertidas y te llevan a un punto...
—Peor que el anterior.
—Peor que a donde fueron aplicadas. Y el caso del menemismo es paradigmático en este sentido, lo ilustra cabalmente. Y Menem, nunca dejo de decir que Menem terminó muriendo siendo un senador K, siendo un senador que votaba todo en línea con lo que era lo que quería el gobierno K. Porque Menem, todos piensan, y esto es muy interesante pensando en Javier y en el futuro. Menem asume en el 89, se había caído el muro de Berlín, en ese momento parecía que quedaba un solo foco de poder en el planisferio, que era el Consenso de Washington. El Pacto de Varsovia había caído. Entonces Menem, adonde podía y tenía para ir, a un solo lugar, al Consenso de Washington, y todo el mundo en 1989 estaba con el Consenso de Washington. Menem hizo lo que hizo todo el mundo, se subió a la ola de moda. De hecho, se subió al plan Brady, que ya estaba primero para México, después para Brasil. Después se sube a las privatizaciones, que ya existían y ya estaban implementadas en algunos países de Latinoamérica. Ahora, ¿cuál es el problema? Que Javier Milei promete, hablando del menemismo, hablando positivamente de Carlos Saúl Menem, que para mí es el padre del kirchnerismo, que él va a hacer lo mismo que Menem, o algo parecido, es más, está con Roque Fernández, está con Carlos Rodríguez. La dolarización, hay que recordar que después de la crisis del sudeste asiático del 97, Rusia, 98. Menem la presenta como dolarización sin juicio de valor mío al respecto. El problema es que Javier quiere ir en contra, no es como Menem, que hizo lo que estaba de moda en el mundo aquel momento. Javier, y los que lo votan, pretenden que el policy maker argentino vaya a contramano del mundo. Todo el mundo tiene la película promedio de mediano y largo plazo, cada vez más Estado, todo el mundo tiene cada vez más gasto público. Todo el mundo tiene déficit fiscal creciente. Todo el mundo tiene cada vez más masa monetaria sin respaldo. Todo el mundo tiene cada vez más deudas. Y si usted se fija, Javier y su equipo prometen ir exactamente en el sentido contrario. Y realmente creo que la sociedad vota a Javier, porque es simplemente el vehículo. Ojo, es mérito de él haberse transformado en ese vehículo. Pero Javier es el vehículo que supo captar el hastío de la gente con Juntos por el Cambio, y que es peor que con el kirchnerismo, porque Juntos por el Cambio vino a cambiar el kirchnerismo, y no lo cambió nada cuando tuvo su oportunidad y tampoco aprendió nada. El kirchnerismo es el kirchnerismo, también la gente se hartó del kirchnerismo. Javier capta eso, y él piensa que hay una revolución de la libertad. No hay ninguna revolución de la libertad, hay simplemente hastío. He leído encuestas que cuando se le pregunta por reformas estructurales a la gente, el 70% está en contra de la dolarización, el 70% está en contra de la educación privada, el 70% está en contra de los vouchers, el 70% está en contra de la libre portación de armas. Entonces, la gente no va a avalar ninguna reforma estructural profunda en el sentido de la libertad, porque simplemente está hastiada, lo vota a él, pero todavía está a años luz de tener la cosmovisión liberal.
Larga nota , muy ''intelectual'' para el vulgo pero rescato varias cosas y coincido en que va a contramano del mundo y que no tiene ninguna chance de hacer lo que dice que ademas generaria un caos social , es solo que los votantes se hartaron de los K y ya se dieron cuenta hace rato que los amarillos son de cuarta , portenios tilingos jugando al administrador que quieren un pais como si todos fuesen como los ricos de CABA ....
es ir por un cambio que les de una cajita feliz ...no mas que eso ...lo abandonaran en poco tiempo ...
y las deudas se los comeran antes ....pero a todos ...solo hay defaults en el futuro ...camino a Haiti ...